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Las edificaciones para el mundial de la FIFA 2022 están rodeadas por la controversia, una que este monumento no edificable plantea poner sobre la mesa

 

El mundial de fútbol de la FIFA es por mucho uno de los eventos más mediáticos de la humanidad, no solamente en el tema deportivo, sino que se inmiscuye en muchos otros aspectos y mercados que lo convierten en el escaparate perfecto para prácticamente cualquier cosa. Por ello, cuando se busca la sede de la próxima justa mundialista, los países del mundo buscan a toda costa ser el siguiente anfitrión del máximo evento futbolístico del mundo, buscando exponer sus logros políticos, económicos y de infraestructura mediante este evento multimillonario.

Ser la casa del mundial de fútbol significa estar en la mira pública de prácticamente todo el planeta, fenómeno que cualquier gobierno buscaría aprovechar para exhibir su calidad de vida, poder económico y su más avanzada infraestructura, mediante los modernos estadios que albergarán los partidos como la infraestructura que rodea a sus principales ciudades y entornos. Justamente este es el caso de Catar, país ubicado a las orillas del Golfo Pérsico, cuya riqueza busca ser exhibida durante la próxima edición del mundial de fútbol, mostrando al mundo su capacidad de infraestructura que ha llevado al país árabe a edificar los más modernos estadios de fútbol, muchos de ellos diseñados por los mejores de la industria arquitectónica, que, lamentablemente, se han visto envueltos en medio de la polémica debido a las malas condiciones laborales a las que sus constructores son expuestos, donde el neo esclavismo e incluso la muerte rodean las edificaciones del magno evento futbolístico.

El medio de tan controversial asunto, la firma arquitectónica francesa de 1 Week Project, ha lanzado un proyecto no edificable que pretende evidenciar la situación detrás de la arquitectura mundialista en Catar mediante un memorial que edifica una torre de bloques a modo Jenga, cuya altura está determinada por la cantidad de víctimas mortales que la construcción de los estadios mundialistas ha dejado a su paso. 

Temas delicados que deben exponerse

Los preparativos para albergar un evento de las magnitudes de un mundial de fútbol o una edición olímpica requieren muchísima planeación y años de edificación. Desde hace más de 10 años, catar se ha concentrado en completar sus sedes mundialistas, los más modernos estadios de fútbol entre los que destacan obras diseñadas por firmas arquitectónicas de renombre, entre las que destaca la firma Zaha Hadid Architects, cuya fundadora diseño personalmente uno de los más icónicos recintos.

Pero detrás de toda esta odisea de arquitectos de renombre, inversiones millonarias y una fachada que buscará impresionar al mundo, existe una serie de situaciones poco éticas dentro de la edificación de estos templos del fútbol, entre las que destacan la injusta y casi inexistente paga a los constructores, malas condiciones laborales, y tal vez el temas más delicado, la muerte de cientos de trabajadores, situación que rosa en neoesclavismo y que no pareciese importarle mucho a las grandes figuras detrás de la sede mundialista y al gobierno catarí mismo. Teniendo en cuenta que gran parte de la mano de obra del mundial de catar proviene de inmigrantes indios, tibetanos y de zonas de conflicto, el trabajo más rápido es entrando a esta industria, cuyas condiciones están lejos de ser las mejores, y que, teniendo en cuenta la prisa de tener todo listo para el invierno de este año, se han convertido en todo un martirio del que pocos quieren hablar.

Towering Folly

En un mundo globalizado, estas noticias cruzan fronteras a pesar de los esfuerzos de los gobiernos y las corporaciones por intentar contener una situación tan delicada y controversial como esta. Tanto así, que la firma arquitectónica francesa, 1 week project ha ideado un concepto para un proyecto no edificable que busca evidenciar y exponer ante el mundo las deplorables situaciones laborales que los constructores detrás del mundial de Catar padecen todos los días, destacando, claro está, las muertes que las autoridades cataríes y los directivos de la FIFA parecen ignorar.

Se trata de Towering Folly, una torre de bloques de hormigón que recuerda bastante a una torre del popular juego Jenga, salvo por la cruda realidad que su edificación expone. En ella, cada bloque de hormigón apilado en espiral representa a una víctima mortal detrás de la construcción del mundial de catar 2022, siendo hasta la fecha, más de 400 los nepalis fallecidos en las obras para Catar 2022, levantando esta torre conceptual casi kilómetro y medio por encima de Doha.

Claramente, este proyecto solo contempla su renderización y jamás será levantado, pero expone una situación preocupante por parte de las autoridades cataríes, que en una región caracterizada por la poca o nula existencia de los derechos humanos, no sorprende que las obras sean renovadas tan pronto sea posible, sin prestar atención a las víctimas y priorizando en el evento que en diciembre próximo capturará la atención de todo el mundo. 

Buscando exponer el drama en el que viven quienes buscan una oportunidad laboral en Catar, Towering Folly, el memorial a las víctimas de catar 2022, tratará por medio de sus realistas renders y todo el concepto detrás del proyecto, que simula muy bien un proyecto arquitectónico real, alzar la voz por aquellos que ya no pueden ni podrán hacerlo una vez terminadas las obras y el planeta entero se concentre en las justas deportivas, ignorando la cruda realidad que muchas veces envuelve algunos de los eventos más mediáticos de la historia.