Los espacios departamentales de tamaño industrial son la tendencia residencial neoyorquina para el mundo.
En la búsqueda de tu propio espacio para habitar existen los que desean un lugar amplio, espacioso y que ofrezca muchas posibilidades para decorar de manera libre sus interiores. Sabemos que en esto del mundo inmobiliario lo que suele ofrecerse son departamentos ya diseñados y previamente distribuidos en cuanto a sus espacios, algo que a muchos les funciona, otros lo aceptan por que es lo que hay, y aquellos que se aferran a buscar algo único listo para decorar ellos mismos.
Para estos espíritus creativos amantes del interiorismo existe un estilo que ofrece esta oportunidad para decorar y distribuir a su antojo un espacio departamental, inspirado en los grandes departamentos tipo almacén de Nueva York de donde obtienen su nombre. Los famosos Loft, aquellos departamentos de grandes espacios, altos techos y aspecto industrial son la alternativa de vivienda para quienes prefieren convertir su hogar en su taller creativo, o simplemente decorar a su antojo la distribución del hogar una y otra vez.Directo desde la Gran Manzana, conozcamos el estilo Loft.
Nacido en nueva York
Si te encuentras sumergido en esto de la vivienda neoyorquina o departamental, o simplemente eres aficionado del interiorismo, tal vez conozcas este estilo de departamento que mucho tiene que ver con la ciudad de Nueva York, la cual, vio de primera mano su surgimiento como alternativa de vivienda para los artistas y estudiantes de mediados del siglo XX.
Nueva York es una ciudad basta que ha cambiado bastante con el paso de los años, y así como sus calles se transforman, sus edificios y sus usos también lo hacen según las necesidades de sus habitantes. En el siglo XIX, Nueva York estaba repleto de fábricas y ensambladoras que tenían como sede edificios cuyos pisos enteros funcionaban como naves industriales para el trabajo obrero. Estos grandes almacenes al interior de las edificaciones a lo largo de la ciudad resguardaban la actividad obrera de la ciudad para las diferentes industrias de la época, de ahí el aspecto industrial que hoy los Loft poseen.
Tras la paulatina partida de estas fábricas a otras zonas lejos del área urbana de Nueva York, estos grandes espacios al interior de los edificios comenzaron a quedar en desuso a la espera de una segunda oportunidad, la cual llegaría con un boom a mediados del siglo XX con la ola artística neoyorquina que buscaba espacios amplios dignos de talleres de arte donde realizar obras únicas y exponerlas sin ningún impedimento.
Espacios para la creación
Estos grandes almacenes, naves y espacios industriales rápidamente se convirtieron en objeto de deseo para los artistas de Nueva York quienes buscaban donde establecer sus talleres de arte a precios accesibles. Este boom se daría principalmente en SOHO, donde los pintores, fotógrafos y galeristas encontraban espacios a renovar mediante su visión creativa dando un segundo uso a estas grandes naves fantasmas industriales. Su naturaleza de grandes espacios sin divisiones, techos altos e iluminación natural gracias a sus grandes ventanales ofrecen lo necesario para montar en sus interiores talleres de gran tamaño en medio de una ciudad caracterizada por ser el centro cultural del mundo moderno.
Nada podía encantar más a un genio creativo que un espacio de estas dimensiones y características, por lo cual su popularidad creció de manera exponencial hasta convertirse en toda una tendencia que prevalece aún hoy en día, esta vez ligeramente orientada a un uso residencial más que artístico. Si bien muchas agencias, compañías creativas o artistas independientes siguen establecidos en esta modalidad Loft, hoy es la tendencia residencial lo que pone a este estilo en la mira del mundo moderno interiorista.
Loft versátil en el interiorismo
Como residencias, los loft ofrecen el espacio de una nave industrial para ser montada como un departamento habitable, sin divisiones, sin muros y sin restricciones para la decoración a tu antojo. Por ello, son la gran tendencia departamental dentro de los edificios que cuentan con estos amplios espacios más allá de Nueva York. La tendencia de la renovación de antiguos edificios alrededor del mundo ofrecen la oportunidad de utilizar estos pisos a modo de Loft, eliminando muros y habitando las zonas céntricas de las ciudades nuevamente.
Entre los estilos que la modalidad Loft ofrece se encuentran el clásico estilo industrial o high tech, el cual se caracteriza por mostrar los componentes de estructura, cableado y técnicos al natural mostrando un aspecto industrial. El minimalismo también es una opción para el estilo Loft, contando con espacios tan amplios, el menos es más funciona de manera excelente ante la amplitud del entorno con pocos elementos y colores base que resaltan la ausencia de lo innecesario. El cada vez más popular estilo Nórdico también encaja bastante bien con los Loft, predominando en sus amplias naves industriales los elementos naturales como el mobiliario de madera, plantas y los colores cálidos. Finalmente, el estilo rústico es tal vez el más famosos dentro de esta tendencia, mostrando los elementos rocosos de la piedra, el metal y la madera como acabados ideales en compañía de un mobiliario y decoración vintage de todo tipo, un estilo que sin duda caracteriza los Loft neoyorquinos de nuestra época.
Las múltiples posibilidades residenciales, artísticas y profesionales que ofrece el estilo Loft dentro y fuera de Nueva York colocan a este estilo de interiorismo como una inteligente apuesta por la renovación de los espacios industriales en abandono o desuso dentro de las grandes ciudades del mundo. El sueño de todo artista o amante de lo cosmopolita está ahora al alcance de todos, solo basta con encontrar el espacio adecuado y saberlo decorar de la mejor manera.