La nueva sede del grupo financiero neoyorquino marcará un renacer corporativo en Manhattan de la mano de Norman Foster.
En los últimos años se ha manifestado una tendencia de redensificación urbana en la Ciudad de Nueva York, donde los edificios antiguos existentes, predios y otros espacios en desuso, han sido aprovechados para una segunda oportunidad ante la creciente ola de renacimiento corporativo que vive especialmente Manhattan. Dentro de este fenómeno destacan los grandes proyectos corporativos donde las prestigiosas firmas arquitectónicas llegan para formar parte de la próxima generación de rascacielos modernos en la ciudad más importante del planeta en el mundo inmobiliario.
En el 270 de Park Avenue, hoy de edifica el próximo gran hito de la ciudad de Nueva York, diseñado por las mentes brillantes detrás de la firma arquitectónica británica Foster + Partners, quienes han concebido un rascacielos que reúne todas las tendencias del mundo inmobiliario del siglo XXI, y que hace guiños a uno de los estilos arquitectónicos más icónicos de la Gran Manzana, el Art Déco. Este megaproyecto será la próxima gran sede de la empresa financiera JP Morgan, y alcanzará un récord al ser el primer edificio completamente eléctrico libre de emisiones, cuya altura y diseño cambiarán el panorama de Manhattan para siempre.
JP Morgan y su nueva sede
JP Morgan Chase & Co, es una de las compañías financieras más antiguas e importantes del mundo. Con sede en Nueva York, su sede actual se localiza en un edificio construido en los años 60, con una capacidad que hoy se ve rebasada, principal necesidad para buscar un nuevo centro corporativo. Para una empresa de prestigio como lo es JP Morgan, es necesaria una firma arquitectónica que logre cumplir sus deseos y necesidades, por lo cual, la firma de Norman Foster fue el equipo seleccionado para llevar a cabo dicha empresa, la cual tendrá como núcleo la sustentabilidad.
El visionario proyecto de Foster + Partners
Buscando la revitalización de Manhattan y la renovación del concepto corporativo en la Gran Manzana y en el mundo, el equipo liderado por Norman Foster logró diseñar uno de los megaproyectos verticales más innovadores hasta el momento. El edificio conocido como JP Morgan Chase Tower, ubicado en el 270 Park Avenue, se convertirá en el próximo gran exponente de la edificación sustentable, teniendo como principal característica, más allá de su increíble apariencia estética, el ser un edificio de gran altura completamente Cero Emisiones.
El rascacielos de 60 pisos operará de manera completamente eléctrica, obteniendo su alimentación mediante energía completamente renovable, aprovechando la luz natural mediante un diseño planificado que favorezca la entrada de luz solar y de ventilación. Buscando también la hospitalidad y bienestar de sus usuarios, se utilizarán materiales biofílicos para su edificación, se crearán espacios de esparcimiento al nivel del suelo y contará con áreas verdes aledañas en busca de hacer más cómoda su estadía y uso corporativo.
Un guiño Déco
Su naturaleza sustentable coloca a la nueva sede de JP Morgan en el ojo público de la edificación, pero su diseño interior y exterior lo posicionan como el próximo protagonista de Manhattan y el legado de JP Morgan a la ciudad de Nueva York. Su diseño exterior fue ideado para abarcar un espacio menor a nivel de suelo, elevándose de manera escalonada con una línea de diseño que recuerda bastante la simetría del Art Deco cuyos ecos aún pueden apreciarse en la ciudad.
Su estructura de acero color cobre visible en el exterior y el cristal ofrecen una impresionante vista de la próxima generación de rascacielos neoyorquinos, cuyo interior comparte la misma modernidad y ofrece amenidades que buscan ofrecer bienestar y una mejor calidad de vida a los usuarios de este centro corporativo. Entre sus amenidades destacan un centro de salud y bienestar, centro de yoga, sala de ciclismo y fisioterapia, espacios de oración y meditación, mientras que en términos generales, la torre de JP Morgan contará con un lobby de lujo y dimensiones considerables, un centro de comida, más de 50 mil dispositivos electrónicos que conectan todo el edificios y la presencia constante del elemento natural al interior del rascacielos.
Impresionante, moderno y sustentable, el gran hito de la edificación corporativa de Manhattan ya ha comenzado su construcción con miras a ser concluida en 2025, recordándonos que la mutabilidad de la arquitectura es una constante en este sector tan cambiante. Hoy la sustentabilidad es la tendencia, alcanzando niveles nunca antes vistos en la edificación acompañada de la tecnología impregnada en todas partes y un diseño lujoso y ultra moderno, por lo que nos preguntamos, sí esto es lo Top en la edificación, ¿Qué podría superarlo mañana?