Un centro de meditación digno de Buda.
Buda, cuyo nombre original era Siddhartha Gautama, fue un sabio y líder espiritual que vivió en el noreste de la India en el siglo VI a.C. Fundador del budismo, Buda dedicó su vida a la búsqueda de la verdad y el significado más profundo de la existencia humana. Nacido en una familia real, renunció a su vida de lujo y comodidad en busca de la iluminación espiritual. Después de años de meditación y reflexión, alcanzó la iluminación bajo el famoso árbol Bodhi, convirtiéndose en el Buda, el “Iluminado” o “Despierto”.
La influencia del budismo se expandió rápidamente por el continente asiático, llegando a tener un impacto significativo en diversas culturas y regiones, incluido el Medio Oriente. Aunque el budismo no es la religión predominante en esta parte del mundo, ha dejado una huella notable en la espiritualidad, la filosofía y la cultura de la región.
A través de rutas comerciales y contactos culturales, las enseñanzas budistas se difundieron hacia el oeste, influenciando a diversas comunidades en el Medio Oriente. A lo largo de los siglos, el budismo ha contribuido a moldear perspectivas filosóficas y prácticas espirituales en la región, estableciendo conexiones entre Oriente y Occidente. Aunque no se puede considerar la religión principal en el Medio Oriente, la presencia del budismo ha fomentado diálogos interculturales y ha enriquecido la diversidad espiritual de la región, destacando la capacidad de las enseñanzas budistas para trascender fronteras geográficas y culturales.
Desafío para Boeri Architetti
El estudio italiano Stefano Boeri Architetti presentó su plan maestro para un centro de meditación y jardines en la stupa Ramagrama, un lugar de peregrinación budista en Nepal. Su diseño se centra en la introducción de 2 jardines alrededor de un árbol centenario bodhi.
Los jardines llevarán por nombre ‘Prado de la Paz’ y ‘Jardín del Anillo de Biodiversidad’; a la par, se proporcionarán nuevas instalaciones de oración. En el centro de todo el proyecto se encontrará ‘Peace Meadow’, un gran jardín abierto que será ajardinado para parecerse a una mandala, símbolo espiritual del universo formado por patrones geométricos.
Un jardín digno del budismo
“Este proyecto representa para nosotros un desafío extraordinario: el de crear un centro significativo para la oración, la meditación y la paz en uno de los lugares más sagrados del budismo”, dijo Stefano Boeri, fundador de la firma de arquitectura. Según expertos, debido al “valor universal” y su naturaleza colaborativa entre culturas y naciones, este proyecto podría convertirse en uno de los proyectos de patrimonio cultural en curso más importantes de Nepal. Cabe destacar que este nuevo diseño hace referencia al trabajo del arquitecto japonés Kenzo Tange. El sitio está ubicado en Ramagrama, un municipio a orillas del Río Jharanhi en el oeste de Nepal, y data del siglo VI a.C.
