Una de las series de animación más aclamadas por la generación millennial está fuertemente inspirada por la arquitectura y tradición del gigante país asiático
Agua, Tierra, Fuego y Aire son los elementos centrales del universo de Avatar, la leyenda de Aang, serie de animación de Nickelodeon que en 2005 llegó para cambiarlo todo, sin exagerar. En solo 3 temporadas, Avatar ofrece una historia única de principio a fin, con personajes, aventuras y situaciones tan bien pensados que no por nada es una de las series más queridas por la generación del milenio, quienes encuentran en personajes como Aang, Zuko, Katara y Sokka, figuras entrañables que van más allá de una caricatura para “niños”.
Dentro de este universo increíble nos encontramos con ciertos elementos que podrían parecernos muy familiares cuando vemos la serie por primera vez, pues los lugares en los que está ambientada la historia, si bien son ficticios, están fuertemente inspirados por el mundo real de la antigüedad, precisamente en algunas de las culturas de oriente, siendo la principal influencia, tanto mitológica, arquitectónica y cultural de esta increíble serie la de China y su pasado tradicional.
Ya seas un fanático de esta serie o recién te dispongas a verla, te aseguramos que este articulo te parecerá muy interesante, potenciando tu fanatismo aún más o terminando por convencerte de mirar esta serie de una vez por todas.
Cuatro elementos, cuatro naciones
Tal como nos explica el Tio Iroh en uno de los capítulos, el mundo de Avatar está conformado por cuatro naciones o regiones, representadas por los elementos que algunos de sus pobladores poseen la capacidad de manipular (los famosos maestros). Este mundo ficticio se inspira en nuestro mundo real, compartiendo similitudes entre las culturas ahí representadas con algunas existentes en nuestro mundo. Por ejemplo, la Tribu Agua, quienes se rodean de dicho elemento obtienen su inspiración de los pueblos que habitan regiones heladas del planeta, como los esquimales.
En este sentido, vemos también como el resto de las naciones tienen un influencer común, uno que se caracteriza por su pasado feudal lleno de tradición y cultura mitológica, de grandes edificaciones arquitectónicas que literalmente han inspirado ciertos lugares dentro del universo de Avatar de forma incuestionable. Nos referimos a China, la principal influencia en esta serie, cuyas contribuciones van desde la vestimenta hasta las festividades, pasando claramente por la aportación arquitectónica, elemento clave en el universo de Aang que nos ayuda a ubicar tal vez el periodo histórico en que se desarrolla la trama.
Nómadas Aire
Los Nómadas Aire están inspirados en los monjes tibetanos y los guerreros shaolin del mundo real, de quienes obtienen su inspiración tanto en sus prácticas como en su indumentaria. Dentro del universo de Avatar, los nómadas aire se caracterizan por habitar en templos ocultos entre las montañas a los que solo ellos pueden acceder gracias a sus habilidades para controlar el elemento Aire, templos que nos recuerdan no solamente al Tíbet, sino que obtienen características dignas de los templos hinduistas.
Nación del Fuego
Por su parte, la Nación del Fuego, se inspira en la China tradicional, teniendo como punto de partida uno de los elementos más icónicos de la China feudal: el dragón, criatura de la cual obtuvieron su poder los maestros fuego y que para China representa el poder. Teniendo como elemento principal el fuego, esta nación se rodea de una arquitectura tradicional de tonos rojos y dorados, donde los tejados, edificios, plazas y jardines nos recuerdan los entornos más tradicionalistas de China, funcionando a la perfección con el orgullo característico de los maestros Fuego.
Reino Tierra
Tal vez la región más influenciada por China sea el Reino Tierra, cuya capital amurallada, Ba Sing Se, cuenta con lugares que son literalmente un copy paste de la China imperial real. Al igual que la Nación del Fuego, el Reino Tierra posee elementos arquitectónicos tradicionales chinos, siendo estos más enfocados en representar el pasado imperial de China con sus enormes edificaciones, destacando la gran muralla que rodea el perímetro de la capital, un claro guiño a la Gran Muralla China. Por su parte, el corazón del reino tierra posee la residencia del Rey Tierra, un enorme palacio de amplios patios y jardines que sin duda alguna está inspirado en la Ciudad Prohibida de Beijing, antiguo palacio imperial de una China ya lejana.
Referencias históricas y arquitectónicas, personajes entrañables y una historia perfecta de inicio a fin, son algunos de los puntos fuertes que hacen de Avatar, la leyenda de Aang una serie imperdible para prácticamente cualquier persona. Elige tu elemento y adéntrate en este increíble universo.